ESB - PRINCESS MARGARET: 0 - 12 PARTIDO CON MUCHA ÉPICA PERO CON POCA HISTORIA

Fantástica lección de pundonor la ofrecida ayer por los jugadores de LA RICOLA MECÁNICA, a pesar de la abultada derrota cosechada. La fecha del partido era la peor que nos podían proponer y la inflexibilidad de la organización a la hora de buscar otras opciones, obligaron a que el equipo Suizo se presentara a la cita con cuantiosas y muy sensibles bajas. A pesar de ello, los Joan, Jean Luc, Walter, Thomas, Joao, Guillermo, Gilbert, Jordi Domenech, Jordi Boter, Santi y nuestro Mister Alex dieron la cara en todo momento y defendieron la elástica rojiblanca hasta el último instante.

Antes de empezar el partido, todos éramos conscientes de la gran desigualdad que iba a existir sobre el terreno de juego, ya que la RICOLA MECANICA acudía al encuentro sin sus habituales centrocampistas y sin ninguno de sus delanteros, mientras que el Princess Margaret se presentó con toda su artillería.

Y empezó el partido;

Los primeros minutos fueron de tanteo, aunque nuestra táctica era muy clara, saliendo con una defensa sólida, con Joan en la portería, una primera línea de tres formada por Thomas, Jean Luc y Guillermo y un centro del campo formado por Walter, Santi y Gilbert. Intentamos mantener las líneas muy juntas en todo momento y defender cerca de nuestra portería, para procurar dejar pocos espacios al rival, pero ellos eran un equipo muy rodado y muy bien estructurado, que movían muy bien el balón de lado a lado y triangulaban con facilidad, lo cual nos provocaba un gran desgaste físico que íbamos a notar en la segunda parte.

El dominio británico era abrumador y suficiente trabajo teníamos con intentar aguantar el alubión de juego que se nos venía encima. La RICOLA se defendía como un caballero con escudo pero sin espada, ante un alubión de rivales armados hasta los dientes, que nos atacaban desde todas las posiciones. A pesar de que nuestro empeño se centraba en intentar destruir el elaborado juego británico, tampoco descuidamos el ataque y en la primera parte tuvimos varias ocasiones para marcar, en varios contraataques muy bien trenzados por Gilbert, Thomas y Walter, pero el portero inglés se mostró muy acertado. En esta primera parte nuestro Mister Alex empezó a ordenar su habitual y necesaria ronda de rotaciones para intentar oxigenar al equipo. De esta manera Joao, Jordi Domenech y Jordi Boter hicieron una gran aportación defensiva. Pero el ritmo de juego era muy alto y la delantera británica se mostraba muy acertada y a pesar de la excelente actuación defensiva de nuestro equipo, llegamos al final de la primera parte con un 4 a 0 en contra.

El tiempo de descanso fue difícil de asumir, viendo que las fuerzas ya estaban muy justas y que el resultado empezaba a ser muy abultado. Además el descanso no duró ni tres minutos, por lo que no tuvimos tiempo ni para respirar.

Y empezó la segunda parte;

La tónica era la misma que en los primeros 25 minutos, pero con el agravante de que nuestras fuerzas ya estaban prácticamente agotadas. El dominio británico era absoluto y los Suizos nos defendíamos con orgullo, porque era lo último que nos quedaba y aguantábamos las dentelladas que una tras otra nos iba propinando nuestro rival, que no aflojaba el ritmo ni levantaba el pie del acelerador, a pesar de que eran conscientes de que estábamos completamente a su merced. Así empezaron a hacer grande el campo, triangulando y jugando por las bandas, con lo que conseguían acabar con las últimas energías que nos quedaban. Sus triangulaciones eran preciosas y en ocasiones se plantaban tres jugadores solos delante de un desesperado Joan, que tuvo que ver como en la segunda parte le superaban hasta en ocho ocasiones. La avalancha de juego era brutal, pero a pesar de ello, los Suizos apretamos los dientes y no nos entregamos en ningún momento. También tuvimos nuestras ocasiones para reducir distancias, pero un libre indirecto lanzado magistralmente por Thomas, fue a estrellarse contra la cruceta de la portería Británica. La suerte nos estaba negada esa noche, mientras que a nuestros rivales les salía todo. Creo que el árbitro fue piadoso y pitó el final del partido con algún minuto de antelación, ya que todo estaba decidido y el encuentro se había convertido en un auténtico pasacalles.

A pesar de la derrota, pienso que todos nuestros jugadores rallaron a un buen nivel. Joan tuvo brillantes intervenciones, sobretodo en la primera parte, Jean Luc estuvo sensacional en defensa, haciendo una exhibición de colocación y capacidad de anticipación, Thomas hizo un partido inmenso y estaba en todas partes, ya que era un muro en defensa y además todavía tenía arrestos de subir al ataque. Hay que destacar que en la primera parte Thomas hizo la jugada del partido, cuando arrancó desde nuestra zona de medios con el balón controlado, dribló a dos defensas que le salieron al paso y sorteó también al portero británico, pero tuvo la mala fortuna de que su lanzamiento se estrelló injustamente contra el lateral de la red de la portería del Princess Margaret. Hubiese sido un gol de bandera, pero la jugada consiguió arrancar los aplausos de todos los presentes.

También Gilbert hizo jugadas de gran merito, escapándose por velocidad, pero nuestros ataques eran siempre en inferioridad numérica y además el meta británico tuvo una lucida actuación durante toda la noche. Guillermo también hizo un partido muy completo en defensa y ataque y realmente está demostrando una progresión enorme y pienso que ya se ha afianzado como lateral izquierdo titular. Santi se batió el cobre en la banda derecha con su entrega habitual y demostró que su trabajo en los entrenamientos se está plasmando y empieza a dar claros resultados en el terreno de juego. Walter hizo un gran trabajo en el centro del campo y siempre que podía intentaba sumarse al ataque abriéndose por banda, lo que le obligó a hacer un gran desgaste físico. Joao tuvo que retrasar su habitual posición para ayudar en labores defensivas y estuvo muy atento en el corte y en la anticipación, salvando jugadas de mucho compromiso. Jordi Doménech aportó su habitual entusiasmo y estuvo sensacional en el corte y en la contención y hasta tuvo oportunidad de protestar al arbitro en una clara cesión al portero, que el colegiado no concedió. A pesar de ello, Jordi siguió luchando como una jabato y se multiplicaba en defensa y en ataque como un autentico panzer, infundiendo carácter al equipo.

Por su parte Jordi Boter se movió muy bien por la zona de medios y siempre que pudo intentó salir al contraataque, a pesar de que era una tarea muy complicada. La batalla fue tan dura que hasta nuestro Mister Alex se apretó los machos y salto al terreno de juego para defender nuestro lateral izquierdo y realmente tuvo una muy buena actuación ya que tiene una excelente visión del juego, lo que le permitió anticiparse en numerosas ocasiones y cortar algunas de las numerosas triangulaciones Británicas, sacando el balón controlado con mucho criterio.

A pesar de la abultada derrota, que puede ser catalogada como un accidente a causa de las sensibles bajas que teníamos, el ambiente en el vestuario fue de fiesta total, ya que todos teníamos la sensación de haber dado la cara, a pesar de que antes de empezar ya sabíamos que nos la iban a partir, pero defendimos el estandarte Suizo con orgullo y como premio recibimos la felicitación en pleno del equipo contrario, que se llevó el triunfo con toda justicia. Estoy seguro de que si en el partido de segunda vuelta que deberá volver a enfrentarnos a ellos, la RICOLA MECÁNICA dispone de todos sus efectivos, podremos escribir una historia bien diferente. Yo así lo espero.

Enhorabuena a todos por la entrega y hasta el próximo partido.